martes, 26 de octubre de 2010

No one but me can save myself

A veces me pasa con esa gente que tiene la mirada triste y profunda. Veo tanta melancolía en sus ojos que me gustaría correr hacia ellos y aliviar todo su dolor con el abrazo más fuerte que fuese capaz de darles.
Pero seguramente no necesiten el calor de cualquiera. Lo más probable es que haya solo una persona en el mundo que pueda hacer que su sufrimiento se diluya. Y, por lo pronto, yo no soy esa persona para nadie más que para mi misma.
It seems to mem always mileaway

looking for my old face

lunes, 25 de octubre de 2010

Se me ponen rojos los semáforos

Nuestro amor es el más puro, el más limpio. O eso creemos todos, que nuestro amor es el más sincero, el único sin límites. Que los demás pueden quererse, pero no se aman como nosotros, ¿no es así? ¿No me querías mucho más de lo que los demás pueden llegar si quiera a soñar que alguien les quiera?
Todos lo pensamos, y todos nos esforzamos en creerlo, incluso cuando todo se acaba, cuando el frío nos inunda, nos refugiamos en saber que nuestro sufrimiento es el más puro, el más limpio. Que nuestras lágrimas son las más sinceras, y nuestro dolor el único sin límites.

Bébete el hielo de mis ojos, tráeme el fuego de los tuyos.
...and make me special tonight.

domingo, 10 de octubre de 2010

Any more than a whisper

Creía distinguir una voz, a penas un susurro, entre el repiqueteo de las gotas de lluvia en el cristal de mi ventana. Reconocí en ella esa forma tan suave que tiene el sonido de mis pensamientos de murmurar en el interior de mi cabeza.
Me recordaba que los sudores fríos al verte se habían ido, que el corazón ya no se desbocaba al recordarte, que la piel no se erizaba ni la voz se me quebraba cuando pronunciaba tú nombre, vacío ya de melodía. Musitó, bajito, despacito, que estoy superando todo esto, sola. Y que después de dos veranos esta vez, cuando la lluvia de noviembre venga a besarme el alma de nuevo, todo habrá pasado.
Y supe, mientras acariciaba las teclas del piano, que aquella melancólica melodía sería la última canción que gastaría en tí.

lunes, 4 de octubre de 2010

Noctem Aeternus

Es noche cerrada y sigo buscando en la oscuridad dónde se ha metido todo lo que sentía.
No sé si se fue con la lluvia y volverá con esta, o si ha huido y no regresará jamás. No sé si lo echo de menos, no sé si lo quiero de vuelta, pero voy a averiguarlo pronto, o al menos eso espero.

En esta habitación hace frío, mucho frío, pero la indiferencia me pinta una sonrisa cada noche cuando me dejo abrazar por estas sábanas, heladas también, y comienzo a buscar, una vez más, dónde ha escapado cada latido arrítmico que gritaba tu nombre, hasta el alba.